viernes, 28 de noviembre de 2008

Driving Miss Daisy



Paseando a Miss Daisy
Título original
Driving Miss Daisy
Nacionalidad
Estados Unidos de América
Año
1989
Género
Drama
Formato
Color
Director
Bruce Beresford
Guión
Alfred Uhry
Fotografía
Peter James
Música
Hans Zimmer
Reparto
Morgan Freeman, Jessica Tandy, Dan Aykroyd

Sinopsis
Daisy (Tandy) es una vieja judia a la que tras un accidente automovilistico, su hijo (Aykroyd) le impone un chofer (Freeman) para que la acompañe a todos sitios. La relación entre el chofer y la vieja durará más de 30 años.

Crítica
Puntuacióndel crítico: 5Peliculilla con aspecto de haber sido echa para la televisión que en 1989 ganó el Oscar y yo aún sigo sin entenderlo porque la película no es nada del otro mundo y además está bastante mal estructurada ya que los saltos de tiempo están metidos a palanca y sin fu ni fa en 30 minutos el guionista te esplica 30 años de historia inconexos entre sí y que distinguimos por el horrible maquillaje que lucen los actores, quienes por cierto no estaban en su mejor momento, la Tandy (que le robó el Oscar Michelle Pfeiffer y Jessica Lange) en toda la película no hace absolutamente nada remarcable a excepción de ese patético momento de locura senil por el que probablemente la academia la votó; mientras que Morgan Freeman (en una de sus peores interpretaciones) se limita a reirse tontamente a cualquier parida que dice la vieja "Oh, señorita Daisy, ¡Qué cosas dice usted, Jojojojo!; y lo de Dan Aykroyd no tiene nombre, sale 10 minutos posando y por ello también le nominaron; sin mencionar la horrible y empalagosa música de Hans Zimmer.
Para verla si no hay algo más decente en la tele.Y por cierto por mucho que se ria Morgan Freeman y por mucho Globo de Oro de comedia que ganase, la película es puro drama.Palmarés:4 Oscar: Película, Actriz (Tandy), Guión adaptado y Maquillaje.Nominaciones: Actor (Freeman); Secundario (Aykroyd); Vestuario, Decoración y Montaje.3 Globos Oro: Película, Actor y Actriz.
Driving Miss Daisy
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Driving Miss Daisy
Título
Conduciendo a la señora DaisyPaseando a la señora DaisyEl chófer de la señora DaisyEl chófer y la señora Daisy
Ficha técnica
Dirección
Bruce Beresford
Producción
Richard D. ZanuckLili Fini Zanuck
Guión
Alfred Uhry
Música
Hans Zimmer
Fotografía
Peter James
Reparto
Jessica TandyMorgan FreemanDan AykroydPatti LuPone
Datos y cifras
País(es)
Estados Unidos
Año
1989
Género
DramaComedia
Duración
99 minutos
Compañías
Productora
Warner Bros
Ficha en IMDb
Driving Miss Daisy, también conocida como El chófer de la señora Daisy, Conduciendo a Miss Daisy, El chófer y la señora Daisy y Paseando a Miss Daisy es una película estadounidense de 1989, adaptada de la obra de Alfred Uhry Driving Miss Daisy para la Warner Brothers. La película fue dirigida por Bruce Beresford con Morgan Freeman y Jessica Tandy en los papeles protagonicos. La historia define a la señora Daisy y su punto de vista a través de una red de relaciones y emociones que se desarrollan en su casa, en la sinagoga, entre sus amigos y familiares, temores y preocupaciones. Hoke rara vez se ve fuera de la prescencia de la señora Daisy, aunque el título implica que la historia es contada desde su perspectiva. La película fue ganadora del premio de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas a mejor película en 1989.
Argumento [editar]
En 1948 la Señora Daisy Werthan, una viuda judía de 72 años, vive en Atlanta, Georgia, en la compañía de su trabajadora domestica afroamericana llamada Idella. Después de un accidente en su automovil Chrysler el hijo de la Señora Daisy, Boolie, le contrata un chofer porque ninguna compañía de seguro le asegurara, ella se niega, pero Boolie está decidido para encontrar uno. Mientras tanto, ella está parada en casa incapaz de relizar sus compras, visitas a sus amigos y asisitir a la iglesia, por no poder conducir. Boolie encuentra a un hombre, Hoke Colburn, la señora Daisy en un principio se niega a la ayuda de Hoke, ante el hecho de que las personas puedan llegar a creer que es demasiada vieja y tonta para para conducir. La señora Daisy llega a la aceptar Hoke y el hecho de que ella necesita ayuda para transportarse.
La señora Daisy descubre que Hoke no sabe leer, y por su antigua profesión como maestra le enseña cómo leer. La señora Daisy tiene que asistir a la fiesta de cumpleaños número noventa su hermano en Mobile, Alabama. Hoke le revela, durante el viaje, que es la primera vez que él ha salido del Estado de Georgia.
Durante su viaje de Atlanta a Mobile, la señora Daisy comprende en varias circunstancias durante el viaje sobre los aspectos sociales y los prejuicios raciales. Al paso del tiempo la señora Daisy toma aprecio por Hoke ante varias circunstancias. En 1965, mientras veían la televisión en la cocina, Idella muere. la señora Daisy entristece por la cercanía y el tiempo que compartió con Idella, y acompañada por su familia son las únicas personas blancas en el funeral. Ante los importantes cambio sociales de la época, la señora Daisy observa con especial atención los prejuicios y la discriminación hacia los negros y los judíos por lo que asiste al dicurso en Atlanta del Dr. Martin Luther King, invitando inicialmente Boolie a la cena, pero él se medita sobre su posición y los pensamientos de sus asociados ante la asistencia al acto y sugiere a la señora Daisy invitar a Hoke. la señora Daisy no menciona la invitación a Hoke hasta que él está llevándole a la cena. Su renuencia a invitar a Hoke subraya el racismo pasivo que a menudo pasa desapercibido en comparación con el racismo más abierto y agravado.
Pocos años más tarde, Hoke se llega a casa casa de la señora Daisy y la encuentra en un estado de confusion, él llama Boolie y le dice que su madre se encuentra mal. Antes de la llegada de Boolie logra tranquilizar a la señora Daisy y ella le revela a Hoke que él es su mejor amigo sujetándole mano. Boolie decide que lo mejor para su madre es que sea atendida en una casa de retiro. Dos años más tarde, en 1973, Boolie decide vender la casa de la señora Daisy, y Hoke se ha retirado de la conducción.
Hoke ahora cuenta con 85 años y la señora Daisy con 97 años. Boolie y Hoke se reúnen por último en casa de la señora Daisy y parten de ella a la casa de retiro para visitar la señora Daisy. La película termina con Hoke dando de comer una pieza de pie a la señora Daisy, ambos recordando viejos tiempos y mezclado con la imagen del Hudson que inicialmente Hooke condujo para la señora Daisy desplazandoce por la una calle con rumbo al horizonte.

Comentarios [editar]
Driving Miss Daisy es una la primera obra de teatro de la denominada "Trilogía de Atlanta" de Alfred Uhry, en las que se narra la vida de algunos miembros de la comunidad judía en la ciudad de Atlanta, Georgia. Alfred Uhry consiguió un gran éxito con su obra, llegando a ganar el Premio Pulitzer para obras dramáticas.
El titulo de la película debe ser interpretado como Manejando a la señora Daisy por el papel de Hoke al lidiar con el caracter de la señora Daisy
VIDEOS MUSICALES DE DRIVING MISS DAISY

jueves, 20 de noviembre de 2008

El cine y su impacto en las elecciones norteamericanas


Por Tim Robbins


Hollywood ha calentado el ambiente con películas, vídeos y documentales electorales que no han pasado desapercibidos. Oliver Stone puso en el punto de mira la vida de George W. Bush en la satírita biografía cinematográfica 'W', estrenada poco antes de las elecciones. Michael Moore también quiso poner su granito de arena con el documental 'Milk', la biografía sobre el primer político estadounidense que hizo pública su orientación sexual hacia los hombres, Harvey Milk, interpretado nada más y nada menos que por Sean Penn.
Steven Spielberg ha sido más neutral y se decantó por dirigir un vídeo electoral para movilizar a los votantes sea cual sea su color político. Bajo el lema 'No votes' y en clave de humor Will Smith, Harrison Ford, Tom Cruise, Julia Roberts, Leonardo DiCaprio, Orlando Bloom o Scarlett Johanson, se dirigen a los ciudadanos estadounidenses para pedirles que no voten el 4 de noviembre.
La última en apuntarse al carro de los documentales electorales ha sido Kirsten Dunst, quien ha viajado a Dakota del Norte, el único lugar de Estados Unidos en el que no es obligatorio estar registrado para votar, para rodar un documental sobre cómo vota la población estadounidense.
LA POLÉMICA DE LAS ELECCIONES
La polémica más sonada la ha protagonizado el actor estadounidense y activista liberal Tim Robbins, que necesitó cinco horas y una orden judicial para poder ejercer su derecho al voto en Nueva York, ya que su nombre había sido retirado del censo de su centro electoral. El ganador de un Óscar por su papel secundario en 'Mystic River' (2003) fue a votra y allí se encontró con la sorpresa: le comunicaron que su nombre no estaba incluido en el censo de electores.
El actor y director aseguró haber acudido a ese mismo centro desde 1992 y, desde entonces, nunca ha dejado de ir a votar, no ha modificado su domicilio y tampoco ha cambiado de afiliación política, motivos todos ellos que podrían explicar que se le hubiera excluido del censo. Los responsables ofrecieron al conocido actor la oportunidad de cumplimentar una papeleta provisional, pero éste rehusó, asegurando que ese tipo de voto puede terminar no sirviendo para nada. Desde hace meses, Robbins ha venido pidiendo a los estadounidenses en diversos medios de comunicación que no utilicen ese tipo de papeletas. "Si es su última opción, tómela, pero luche antes por su derecho a ejercer el voto. Es su derecho como estadounidense", aseguró el actor de 50 años, quien finalmente necesitó hasta cinco horas, además de una orden judicial, para conseguirlo.
Entre apoyos, denuncias, documentales y polémicas la carrera hacia la Casa Blanca ha llegado a su fin con Barack Obama como ganador. Los ciudadanos lo han elegido y Hollywood ha dejado su huella en la campaña, lo que ya es una tradición. La meca del cine volverá a involucrarse en la vida política de EEUU, ocurrirán nuevas anécdotas y polémicas, pero habrá que esperar otros cuatro años para verlo.
Medio mundo ha seguido las elecciones norteamericanas conscientes del impacto internacional que supone la elección del presidente de EEUU... políticos, empresarios, medios de comunicación, ciudadanos anónimos y, cómo no, la industria de Hollywood que, una vez más, ha participado activamente en la campaña electoral ya sea para recaudar fondos o para difundir las ideas con las que comulgan. En este sentido, muchos actores han proclamado sus ideas a través de vídeos electorales, canciones en favor de un determinado candidato (el mejor ejemplo se puede encontrar en YouTube buscando 'Yes, we can') o, simplemente, declarando abiertamente a quién iban a votar.

A lo largo de la intensa campaña electoral, la meca del cine se ha posicionado casi al completo a favor del candidato demócrata, ya presidente de EEUU, Barack Obama. La lista de iconos del Hollywood actual que han demostrado públicamente su apoyo a Obama es extensa y diversa. Constan en ella, para sorpresa de los que afirman que la juventud no se moviliza a nivel político, un buen número de los jóvenes valores de la industria: de Scarlett Johansson a Jessica Biel, de Ben Affleck a Matt Damon pasando por Elijah Wood, Leonardo DiCaprio, Jessica Alba, Jennifer Aniston…
La lista continúa con algunos veteranos militantes, como Susan Sarandon, George Clooney (uno de los más activos en su apoyo), Robert de Niro, Tommy Lee Jones, Antonio Banderas, Sharon Stone o Tom Hanks. Mientras que el grueso de los actores afroamericanos también se ha situado del lado de Obama, empezando por Will Smith, continuando con Eddie Murphy o Forrest Withaker, y sentenciando con Halle Berry y Tyra Banks. Para rematar el asunto, encontramos entre los fans incondicionales del candidato demócrata al humorista del momento en Hollywood, Ben Stiller, y al super-héroe más cotizado: Tobey “Spider-man” Maguire.